Zona Chat¡¡¡¡

-Arruga el ceño ante las palabras del maestro y niega automáticamente, cruzándose de brazos en gesto prepotente.- En absoluto.

Entonces por que te escapas -suspira para tomar el brazo del profesor y atraerlo hacia el- no era necesario que me ignoraras

No escapo. -Rueda los ojos, no moviendose de su posición.-

-Suspira largo y tendido, dejando reposar la espalda contra la puerta de salida. Pendiente de todos los acontecimientos.-

*Se acerca al grupo de personas que estan en la sala y saluda con la mano a todos en general*

hola Evra como estas.

bastante bien, Rossiel-sama ^^

que bien y te desaburriste anoche o no?

mas o menos, gracias por la preocupacion

no hay de que, me fue divertido verte asi xD

-Todo el vello de su cuerpo se erizó con el simple contacto de ése dígito y sus labios del mismo color del pétalo de un cerezo se abrieron para dejar escapar un sonido poco elocuente.- Ah...

porque divertido ¬¬U?

-No pudo remediar el que su cuerpo diese una profunda sacudida tan buen punto esa áspera lengua creó un ensalivado trazo sobre sus resecos labios y tratando de hablar, no logró más que provocar que aquello incrementase en vez de menguar. Obviamente, sus mejillas se tiñeron de un profundo carmín.- Yo... Iré...

-Sintió el corazón en la garganta cuando se vio casi obligado a arquear la espalda en dirección el cuerpo del otro y aún más nervioso procuró no caer en las redes de beso. De la nada y ante la repentina y brusca separación del calor antes concedido se dejó a un jadeo que supo a deseo de más.- S-Shuichi. –Bajó la mirada sumido ahora en sus propios y turbulentos pensamientos.-

-Alzó la mirada siendo victima de la sorpresa y sus luceros dieron sin contratiempos con los del mayor, exigiendo con ello una callada explicación.- ¿...Perdón?

Miró el cuerpo que despacio se iba alejando hacía la puerta... el primer paso no se hizo esperar. Se detuvo para sospesar detenidamente en lo que terminaría por pasar si cedía a aquellos felinos movimientos. Pero... ¿Desde cuando el deseo no era mayor a la razón?. Sus andar se volvió cada vez más rápido y sin siquiera pensarlo, sostuvo con sus níveos y delgados dígitos parte de la prenda del adulto.

Le empujó discretamente hacía la dirección oportuna, no siendo otra que su habitación. – Allí. – Susurró, más avergonzado de lo deseado realmente. Su cuerpo entero se acarameló contra la espalda de Sakuma sin dejar de lado los débiles empujones que iban indicándole hacía dónde avanzar.


(Salgo 10' a cenar.)