Like a virgin -Priv-

-sonrojado, no parecia poder dejar de guiarse por como su cuerpo estaba sintiendo, se habia golpeado en la cabeza, vamos no iba a negar que no habi adolido..pero no iba a ponerse a gritar de dolor ya de tantas veces que habia ocurrido, habia temido que algun profesor apareciese...pero su mente empezo a decir que era mejor que ninguno viniera, vamos..a quien negaba que el hecho de tener a semejante alumno a su lado..de pronto su cabeza se movió, negaba, nego no con tanta intensidad que le llamasen loco, pero sin duda se dedico a negar..su respiracion, se calmó pero dedico un sonoro suspiro cuando de nuevo el hecho de sentirle cerca, tras ese beso sus pensamientos se centraban a lo pecaminoso que habia sido y en cambio lo malditamente placentero que le habia resultado- lo se..se que no tenemos prisa...

-el si tenia prisa, por llegar y entrar a lo que el llamaba hogar asi al menos no tendría que ponerse tan nervioso estando en su "terreno" lo que menos podia imaginar era que poca reistencia estaba poniendo, cuando se acerco a su cabeza cerro los ojos, sus manos abrianla puerta escuchandose ese click tipico, justo cuando iba a abrir la puerta, la mano de michael se le adelanto, observó sorprendido sus acciones para asentir con un gesto de curiosidad, al fin el olor tipico de la habitacion de alexander, madera, a libros y a dulce y azucar por algunos dulces que habia creado, se tenso, sus manos fueron timidas a la luz, pero antes de que pudiera encenderla, estaba entre los brazos de michael, abrio los ojos, las llaves cayeron al suelo, su cintura presa, sus labios humedos que se mojaban con el simple hecho de no haber podido tragar la saliva, apreto las manos de michael intentando que no subieran- y-yo no he hecho e-eso yo no h-he coqueteado...

-observo con cohibicion que su camisa se iba elevando y por mucho que sus manos intentaran detener las de michael se notaba que era imposible, su cuerpo, su cintura, su tez palida, todo parecia ser extremadamente femenino, su respiracion, su torso plano, la carne rosada que componia los monticulos de sus pezones y como una delgada linea de vello pubico del mismo color rubio se ocultaba en el comienzo del vientre, sus pantalones se afirmaban..inconscientemente, expuso su cuello- n-no n-no..

-volvio a intentar bajar la camisa, sus labios se abrieron de nuevo, y la torpeza de su "primera vez" era suficiente para reclamar ese hecho, su rubor llenaba todo su rostro y sus gafas parecian querer caerse, las hebras rubias galopaban por su espalda y por el pecho de michael..como hormonas que se escapaban de control, el olor a azahar y jazmin aumento en el ambiente, escuchandose su cuerpo tembloroso y los gemidos que este desubicaba-

Lo tenia donde quería, y no iba a echarse para atrás, deseaba ese momento. Sintió los cabellos del profesor, amoldarse a su cuerpo, buscando maneras de hacerle sentir mejor con el roce de esas hebras contra la piel de Michael. No le soltaba de su agarre, no iba a permitirle alejarse de él, no cuando estaba tan cerca, aparto algunos cabellos del rubio de su cuello, comenzando a besar aquella zona tan delicada para algunos, el mismo Alexander parecía desear aquellos toques, pues su cuerpo le iba traicionando lentamente.

Escucho aquellas palabras cohibidas, temerosas pero aun así parecía poseer cierto deseo en ellas. Apretó las manos que le intentaban detener, entrelazo sus dedos con ellas, y lentamente ambos, por fuerza de Michael, fueron levantando la camisa hasta quitársela por enzima, dejando que de nuevo aquellos cabellos cayeran lentamente sobre ambos. Acerco su nariz, aspirando el aroma del rubio, de sus cabellos y de su cuello, saboreando también la piel del cuello, succionando y acariciándola con la punta de su lengua.

- Claro que si Alex… nada más mírate… tiemblas… te avergüenzas…-

Sus manos con gran pericia recorrieron el torso del otro, tocando cada centímetro de la calidez de aquel, cada poro del cuerpo conjunto parecía estar exhalando lujuria. De nuevo le llego aquel aroma… jazmín y azahar, atrayente, deseoso, dulce y demasiado excitante al menos para el cuerpo del castaño a su lado. Pegó su entrepierna al trasero del otro, sintiendo aquellas nalgas redondas. Dejo escapar un ronroneo, como si fuera un tigre que acababa de encontrar alivio.

- Todo esto significa que me deseas… admítelo… desde que me viste me deseabas, pude notar tus miradas a mi, y no eran precisamente de alguien cuyas intenciones fueran simplemente ayudar-

Susurró en el oído del rubio, un tono de voz bastante lujurioso, cargado de pasión, deseo y excitación. Sentía ya la presión en su pantalón, aquel miembro que buscaba ser liberado, que deseaba salir y penetrar el cuerpo adjunto, mancillarle con el sudor, hacerle gemir de deseo y dolor… deseaba todo de aquel cuerpo a su lado, pero sobretodo deseaba ver a Alexander sin ropa, lleno de pudor y sonrojado.

- Si quieres que me detenga… pídemelo…-

Habló con un tono imperativo, buscando escuchar esas palabras que sabría el rubio no podría articular, pero para colocarle algo más divertido al juego… subió su mano derecha a los labios del profesor, rozo por un momento aquellos delicados labios, que estaban sutilmente abiertos tal vez por necesidad de aire o por excitación. Lentamente fue introduciendo su dedo índice en aquella boca, jugando con la lengua del otro, dándole pequeños toques. Luego introdujo otro, sintiendo como los lamía quizás inconscientemente, pero igual era bastante gratificante.

Un semblante se formo en su rostro, era una sonrisa perversa, esbozada por unos segundos al ver las acciones del rubio, como su cuerpo dictaba deseo mientras su boca, ahora obstruida por sus dedos, había pedido que se detuviera. Michael solo buscaba comprobar cual de ambos podría ganar… sumamente divertido era para él lo que sucedía con el profesor Alexander.

-justo cuando queria marcharse su cuerpo parecia estar atado entre sus brazos, los labios exponían unas bocanadas de aire tan calientes que hasta su mismo aliento parecia quebrantarse entre la humedad, su cuello al fin expuesto..no, no..su cuello aquel talon de aquiles que la mayoria se empeñaba en abusar, no tenia ninguna marca y el olor se juntaba conforme sus hormonas lo exigian, el olor a azahar, a jazmin..incluso el sudor del profesor parecía haberse convertido en un perfume gracil que se evaporaba ya que no mostraba demasiada humedad en esos instantes, se mordio los labios su mirada habia viajado hacia abajo y las gafas con un eco sordo se explayaron al caer, sus ojos no tuvieron impedimento en mostrar la textura de ambos colores que se unian debido al accidente del pasado. sus manos intentaban poner resistencia...si, la poca qu epodia usar, cundosu camisa fué despojada y de nuevo las hebras doradas a pesar de su vanalidad como protagonistas de esa escena erotica, quisieron ocultarle sin mucho efecto- m-michael que ha..haces..q-que..

-"no ves que es lo que esta haciendo maldito majadero" cerro los ojos su cuello, el punto mas debil al ser atacado, lamido, humedecido, mimado y malcriado con esa dama de señoriales modales parecía haber abarcado un gemido de sus labios como si buscase apartarse, su torso se encogia, al igual que su vientre, todo su cuerpo mostraba su tensión pero el rubor de sus mejillas, parecía encenderse acaloradamente al igual que en sus hombros que se marcaba un dulce color rojizo...su cuerpo inconscientemente alzo las caderas cual felino separando sus nalgas tan solo unos milimetros..tan duro, tan..exitante..tan ingobernable, poco a poco su cuerpo parecia pedir mas, el monticulo de sus pezones rosados se marcaron y la aureola de los mismos parecia endurecerse y marcarse..cual presa, suspiro..- de..te

-le habia pedido que le detuviera, queria sacar las palabras sus labios envolvieron a aquel intruso, luego al siguiente luego al otro hasta que su lengua creo una pelicula de saliva que parecia engulir los dedos de michael los cuales entraban en sus labios, tuvo que alejarse de ellos unos instantes, sus labios no poseian aquella profundidad del primer beso apasionado y por mucho que quisiera ser penetrado por los dedos en los labios no podía nada más que exponer un gemido asfixiante, pero no una asfixia..sino, la perdida de aire le resultaba placentero como en el ascensor, donde el hecho de no querer respirar pareciese el agua que le saciaba, cual agil presa se alejo de michael..¿no podia detener sus sentimientos, sus pensamientos-

no..te..detengas..- si..ya habia expuesto sus palabras las ultimas que se usaria..guio a michael hacia la cama, no..lo penso dos veces antes de llevarle hacia la cama y observo sus ojos en la incipiente oscuridad, observo sus ojos y al fin sentó a michael en uno de los sillones mas bajos, necesitaba sentirlo, necesitaba sentirse vivo...se sentó sobre el separando las piernas solo para que la pelvis gobernase un movimiento, suspiro..acalorado- t-tan..duro..-musito sin poder detener esas palabras, coloco las manos en las rodillas de michael, queria sentir mas acerca de ese mundo , ah joder..estaba tan exitado, ya no podia negar que se habia "abierto" a esas sensaciones, podria haber actuado y hecharle, pero queria jugar..solo por una noche, su primera vez..continuo con los movimientos endiabladamente exitantes, necesitaba calma necesitaba el hecho de reconocer que su entrepierna dolia tanto, y que sentia solo calma cuando se rozaba contra la del alumno, con las piernas separadas ahora sus testiculos buscaban ese roce de la erección..abrio los labios, hasta que sintió el hecho de su comportamiento..nunca se habia comportado asi-

lo..losiento -musito cuando buscaba alejarse..levantarse, no queria actuar asi, pero en su interior todo parecia componerse en un "sigue" "devorame" sus pantalones se apretaban, y su torso se mostro como era, cual muñeca de porcelana, palido, con las curvas adecuadas, sus cabellos calmaron su rojizos hombros cayendo como una cortina que cubrió alrededor de su cuerpo suspiraba..agitado al mirar hacia otro lado, su respiracion..expulsaba un vaho..tan poco hacia falta..su cuerpo tan sensible, las marcas de placer, como su pecho subia y bajaba..todo, todo parecia indicar que debia de controlarse..-

El cuerpo del profesor parecía delatar las intenciones de ambos, pues buscaba aquel calor en el cuerpo de Michael. Esbozo una sonrisa mientras continuaba con aquellos tactos, hasta escuchar que no se detuviera, que quería más. Eso había despertado mucho en el cuerpo del castaño – Entonces el profesor Alexander a pesar de ser tímido… también tiene sus manías- riendo para si mismo, ante aquel pensamiento.

Fue “victima” de aquel agarre, de que le llevaran hasta un asiento, en el cual se acomodo, y luego recibió encantado las piernas del profesor abiertas para lograr sentarse sobre Michael, sus manos perversas tomaron aquellos muslos, acariciándolos mientras observaba el espectáculo. Incluso en aquella oscuridad podía ver los movimientos del profesor, su torso pálido y desnudo, sus ojos recorrían sin pudor alguno aquel cuerpo tan apetecible. Escucho los gemidos en las oscuridad, y luego aquellas palabras – ¿Lo siento?... esas no son palabras para estos momentos- pensó divertido mientras sentía como el otro trataba de alejarse.

Le tomo de los brazos con cierta fuerza, acercándolo a su cuerpo, sin permitirle alejarse. Le beso con pasión, juntando sus labios con los del rubio, lamiendo su silueta y luego introduciendo su lengua en aquella boca, buscando despertar a la otra para un “baile” húmedo. Negó con el rostro al separarse, ese beso había sido un premio que se había ganado, pero había que admitir que el castaño no iba a permitir que el otro se alejara.

- No, no Alexander… ya has llegado lejos… ahora debes terminar tu trabajo… te debes quedar hasta que termine contigo-

Acercando sus labios al cuello de Alexander, comenzando a lamer aquella piel que ya había probado antes, bajando por este hasta llegar a la clavícula, dándole leves mordidas. Si necesitaba tener que llevar al profesor a la locura para hacerlo suyo, lo haría, eso no importaba ya estaban demasiado lejos como para irse ahora. Descendió un poco más de la clavícula atrapando las tetillas del otro en sus labios, lamiéndolas y mordiéndolas, reteniéndolas entre sus dientes, dando pequeños tirones de estas.

- Te dije que has estado coqueteando conmigo toda la noche… y esto lo prueba… no lo niegues ahora, admítelo-

Besando aquel torso desnudo ante él, sintiendo los espasmos que daba lentamente, su cuerpo parecía ir traicionando al profesor sin que él mismo entendiera que sucedía. Sus manos le atraparon por las caderas, haciendo fuerza, obligándolas a que se sentara sobre él, que sintiera como le tenía de endurecido en sus pantalones. Al sentir el cuerpo del otro enzima de si, dio pequeños movimientos sugestivos con la cadera, acercando su miembro al trasero del profesor. Como si buscara entrar en él, si no fuera por la ropa que le salvaba de sus estocadas.

Michael dejaba escapar algunos suspiros, jadeos y ronroneos cual felino, que había encontrado el juguete perfecto con el cual desahogarse. Sentía los cabellos del profesor en su rostro, en su piel, rozándole suavemente… era verdaderamente delicioso, pero deseaba más de aquel cuerpo, aunque fuera una noche, deseaba explorarle sin vergüenza alguna.

-su respiracion se agito, no habia sabido hasta ese momento que era el perder la cabeza e incluso se reia de los que decian que en la batalla de los cuerpos no habia ningun vencedor y ni siquiera un perdedor, solo placer pero que remedio tenia su cuando las piernas se separaron y las manos habian acariciado sus muslos, esas manos expertas de michael que ahora tocaban los afeminados muslos, ese choque contra el cuerpo de michael, nuevamente se veia tan pequeño a pesar de la edad de ambos, sus labios chocaron al principio contra el menton de michael,nuevamente, como si hubiera recibido algun tipo de calma para ese dolor, expulso un suspiro de la boca que se extinguió del mismo modo que un diente de leon se pierde en el olvido una vez que has soplado tus deseos- m-michhmmh

-a quien queria engañar en esos momentos que sus labios fueron impuestos silencio su boca se humedecio con la lengua del alumno, ladeo pues el rostro para profundizar el beso que antes a duras penas quería, y ahora exiguia incluso por como su lengua y sus dientes mordian su labio y le buscaban, la lengua abria por completo los labios de michael alejandose con un hilo visible de saliva una vez que dijo esas palabras- n-no...noa..por fav-or el cuello no el el cuello no -su placer iba en aumento, como su

cuerpo nerviosamente subia y bajaba y exponia pqueños temblores, su piel se erizaba visiblemente pudiendose ver el vello rubio del profesor que comenzaba a subir en un baile de erizamientos, apreto el sillon, acorralando el rostro de michael, ya que subio sus rodillas, no apegó su pelvis a la de michael, sino que se elevo apegando su miembro al vientre del muchacho, sus tetillas, empezaron a responder a los toques, a las mordidas, le agradecio el hecho de que bajara a su torso porque si huibiera continuado en su cuello hubiera pedido que le violase ahi y ahora, el hecho de que era virgen..¿lo sabia? ¿debia de decirselo?- m..mich-michael s-soy..s-soy...

-suspiró cuando su cuerpo de nuevo en otro brusco vaivén fue sentado sobre el miembro de michael, no pudo mas que reprimir ese gemido sonoro que estaba saliendo de los labios, ladeo el rostro lo justo como para que sus cabellos acorralasen todo su rostro, su respiracion se hacia mas caliente todavia, de hecho, parecia que su respiracion estaba como siempre delatándose- v-viirgen -abrio los dedos cual felinas uñas para apretar el cuello de michael, suspiro..cuando abria los labios y se levanto. estaba tan endurecido, no podia negar su propia ereccion..sus cabellos se habian caido a lo largo de su cuerpo, necesitaba un descanso..pero su cuerpo no lo queria, queria ahora mismo pertenecer a aquel alumno, de

forma sugestiva se bajo la hebilla del pantalon, mostrando como siempre ese sonrojo que marcaba un camino pecaminoso entre la palidez y el enrojecimiento, trago, cuando se volteó y alzo sus caderas y sus gluteos, sus cabellos borderaron sus piernas, tan suave la piel del profesor que los cabellos rubios se escondieron en sus hombros mostrando su espalda, sus hombros enrojecidos por el placer corporal que iba subiendo, y de nuevo como separaba bajaba su propia ropa interior..iba apresurado, pero no conocia nada de aquel mundo, habian dicho que..habian dicho tantas cosas, no sabia que hacer ahora era cuando se cuestionaba donde quedaba el maldito manual del sexo, se separo suspropias nalgas, comprobandose tan estrecho, al mostrarlo, se mordio los labios volviendo a sentarse sobre michael, escondiendo su vientre y su miembro entre sus cabellos, a pesar de que posicionaba su entrada justo en la ereccion del alumno- a-ahmmg..

-aquella melodia entre ambos, separo de nuevo sus piernas para poder colocar sus talones tras las caderas de michael, de hecho, ese movimiento le aseguro "estabilidad" y que no perdiera el equilibrio mientras tapaba sus labios con la mano en un ademan afeminado, con el dorso de la mano, volviendo a acercar sus labios a los de michael, como si en eso quisiera cubrir los jadeos sonoros, su lengua salio pero sus labios no se unieron, bordeo los labios de michael y la misma lengua, aun sin ser un beso, penetro la boca del alumno, algun que otro hilo caia a su menton, pero poco importaba, queria sentir de nuevo el placer de ambas lenguas, aprovechando esa saliva que bordaba su menton para manchar la camisa del alumno y alejarse, musitando agitado- e-enseñame...q-que es el..s-sexo..y el..p-placer..h-hazme e-el a-amor..-murmuro agitado cuando pronuncio las palabras correctas-

Alexander parecía estar confundido, excitado pero quizás buscaba demasiado algo que quizás debería tomar su tiempo. Era extraño para Michael encontrar alguien como Alexander, se veía tan delicioso pero le entretenía ver los movimientos del ajeno. Sintió la lejanía del otro, parecía que se había elevado, buscando algo en aquella zona que ya pronto llegaría Michael. Solo pudo esbozar una sonrisa al observar en la oscuridad los torpes movimientos, los sonidos que dejaba escapar de sus labios, aquellos labios que le volvían loco al cuerpo de Michael.

Sintió como el profesor iba dejando caer su cuerpo, asegurándose de dejar su entrada al roce de su miembro, era bastante deliciosa la sensación. Pero lo que realmente le hizo sentir que estallaría en sus pantalones, fueron esas palabras – Vaya… entonces el profesor tiene más secretos, es virgen… creo que me divertiré un poco- pensaba mientras sentía el calor ajeno cerca de su cuerpo, rodearlo como si de tentáculos se trataran.

Dejo escapar algunos suspiros y jadeos, mientras esperaba que Alexander se decidiera que hacer, pero al parecer no estaba seguro de cómo jugar sus cartas. Todo iba a ser demasiado divertido, en esa noche si Michael lograba hacer las cosas bien, podrían durar hasta el día siguiente, tenía planeado una larga, placentera y quizás dolorosa noche. Sintió el rodear de las piernas ajenas, a lo cual solo pudo esbozar una sonrisa divertida, tomándole de las nalgas para levantar el cuerpo del profesor y cargarlo.

- Jajaja calma Alexander… prometo enseñarte todo lo que se, de eso no tengas dudas-

Susurró, dio algunos pasos antes de llegar a la cama del otro, tirándolo en esta mientras el descendía el cuerpo, para besarle con pasión. Ambos labios unidos, buscando devorar los del otro, ambas lenguas buscando atrapar a la invasora, entrelazándose en un baile bastante húmedo. Sus manos recorrían el cuerpo descubierto del profesor, sintiendo como con cada toque, con cada roce iban quemando su piel, llegando hasta su mente, obligándole a dejar escapar algunos jadeos.

- Si, Alexander eso justamente pensaba… hacer el amor hasta que te canses, penetrarte hasta que te canses, hasta que desees que deje de entrar en tu cuerpo…-

Susurró de nuevo en el oído del profesor, con un tono de voz socarrón y bastante lujurioso. Sus manos se apoyaron en las caderas del profesor, suavemente dándole la vuelta para dejarle boca abajo, y que apoyara sus rodillas en la cama, alzando su trasero un poco para que las nalgas se fueran separando solas. Acerco sus dedos a la suave piel de esa zona, rozándola con la punta de estos.

- Mmmmm… dime que sientes ahora… que quieres, que es lo que más deseas…-

Hablo en una voz imperiosa, como si acabara de dar una orden. Sus dedos se acercaban a la entrada palpitante del rubio, que parecía dar pequeños espasmos con cada movimiento. Estaba buscando simplemente enseñarle todo lo que sabia del sexo a Alexander y lo primero era, el deseo.

-la mano que con tanto decoro quiso esconder sus labios, ahora no tenia tanto en apretar la nuca del alumno acercandole hambriento y torpe a su boca, no importaba que en algunos momentos se asfixiara o que necesitase aire, tampoco importaba como su cuerpo se erizaba y sus piernas se separaban buscando que sus gluteos se separasen todo lo que podian buscando aquel alivio que le estaba proporcionando, arañando su nuca sus cabellos rozaron sus hombros y su espalda tan tan exitado estaba que su propio cuerpo hablaba por si solo…sus montículos rosados cuyas aureolas parecian brillar de las gotas de saliva que habian caido de su boca rozaron sin decoro alguno el torso de michael cuando fue cargado- ahhg

–musito aquellas palabras aquel jadeo sin sentido…le gustaba el sentirse entre los brazos de alguien que le pudiera dominar ¿dominar? No queria que le dominaran…pero en esos momentos ya no pudo poner calma a sus pensamientos cuando fue situado en la cama, bajo la sublime orden que le habia dado a michael y por esa misma, como el muchacho respondia de esa forma- c-calma

-repitio a pesar de que el mismo sabia lo que le respondería mas adelante. Que no existia calma en esos momentos y que incluso el eco de sus jadeos resonaba con una lascivia aun cuando la ternura siempre estuviera ahí, y los gestos afeminados continuaran cuando cubria a menudo sus labios y separaba los dedos con algunos hilos de saliva que no dudaban en marchar sus dedos como “suyos” propios su lengua..dios esa lengua que abria su boca le causaba tanto placer nunca antes habia logrado nadie poder habrir o dilatar de esa forma su garganta que torpe se sumia al placer aun cuando algunas veces tosia debido a esa asfixia, sus manos le acercaron de nuevo por la nuca y sus dedos arañaron inconscientes su pecho y su espalda no tanto como para una marca pero si como para hacer la presion deseaba- s-si…q-quiero eso

-musito con los colores enrojecidos a la par que su rostro se escondia, sus caderas fueron visualizadas y se alzaron con tanta pasion y dulzura, cuando estuvo bocabajo lo primero que hizo fue alzar las caderas aunque de poco sirvio ya que michael se encargó de eso, sus rodillas hicieron algun que otro ademan arrugado en la cama, separando el mismo sus piernas todo lo que podia, su dedo indice de la mano

izquierda se coloco en sus labios, mordiendoselo tanto la carne rosada de sus labios como su ya maltratado indice, vergüenza…en otro instante habria sentido mucho vergüenza pero ahora un cosquilleo recorria toda su piel, impaciencia, la maldita impaciencia ahora estaba causandole el mismo dolor y el mismo placer al tiempo, su recto fue visualizado, estrecho, dilatandose ofreciendo movimientos de dilación y luego timido se apretaba…afirmo con la mano derecha la sabana sus cabellos caian como una cortina perfecta por su espalda pero que ironicamente…no podian ocultar sus gluteos- a-ahí..ah…

-tan sensible su piel se erizo desde su espalda hasta sus gluteos y de sus gluteos a sus piernas, todo su cuerpo estaba sumido en el electrizante sabor del deseo, abrio los labios, escondiendo al principio sus ojos pero de poco sirvio cuando le dio aquella orden, aquel movimiento que causo que alexander perdiera la cabeza, poco faltaba para que cual poseso le dijera que sin importarle nada continuara…toda toda la noche en un ademan de monturas, queria sentirle toda, toda la noche metiendo y sacando aquella hombria de su ser, queria lamerle hasta saber ya que sabor tenia su piel- q-quiero que..ahg…d-deseo que introduzcas tu dedo en mi..r-recto

-hablaba con la voz de la timidez, apretando ahora un trozo de sabana a sus labios cuando su entrada anal palpitaba e incluso podria sentirse el color enrojecido el mismo que teñian sus mejillas, y ahí estaba alexander sumido al placer, como si no fuera solo una orden o solo un deseo sus labios se abrieron para decir algo pero callaron y sonrojado sostuvo la mano de michael, la que acariciaba aquella zona tan delicada, primero lamio un dedo tras otro, haciendole sentir los movimientos de su lengua

como una vil serpiente, mas adelante coloco la mano libre de michael en sus muslos, los muslos de alexander estaban caldentes, su espalda se visualizaba ya con un poco de color, su temperatura corporal estaba subiendo, tras separar los dedos de la otra mano de michael [la mojada] sobre nalga izquierda al sentirle ronroneo moviendo sus caderas obligando a que esa mano callera justo en su entrada, mirandole, torpemente, se mordio los labios mientras sus ojos, de colores extraños se fundian con los de el que como le ofreciera tanto placer que como le daban sus caricias, no tardaria en llamarle “amo”-