~»†Bajo la oscuridad†«~ -Privado-

¡¡Maldición!! aquellas palabras entraron en sus oidos como llamas quemandole la piel, era demaciado porque sabia demas que Damant tenia la razón cuando se referia a ese "humano" aquel que en vez de darle amor, solo le hacia sentir peor cuando estaba a su lado, le hacia sentir debilidad, frágilidad...le mataba el hecho de saber que ese "humano" no le conferia el mismo amor que el le demostraba cada vez que estaba cerca de él, no, no era lo mismo cuando solo le demostraba indiferencia.
No se percato de la cercania del demonio hasta que sintio el fuerte golpe en el estomago, retorciendose por la falta de aire que este le habia arrebatado...sufrir un puñetazo de un humano era algo llevadero eh incluso indoloro, pero sufrir el mismo daño por uno de su misma raza...era algo cruel, eso si podia considerarse un dolor "fisico" y muy tangible...cuando Damant acestó tan fielmente, su cuerpo se doblo por el gran impacto cayendo sobre un mueble cubierto por una tela blanquesina.
No habia duda de la notoria molestia que ese demonio sentia por decirle cosas acerca del amor, si bien...Rossiel nunca pregunto al otro si realmente se habia enamorado alguna vez, grave error, ahora asumiria el castigo con creces con tal de que esa irá que sentia el demonio no cayera sobre Yullian.
Una mezcla de odio y amor corroia su corazón traicionado, sintiendose muerto en vida...si la muerte estaba ahí en ese lugar, justo aquella noche esperandole con los brazos abiertos ¡¡que así fuera!!...no le importaba nada.
-..¡¡NO DAMANT!! Yullian no tiene la culpa de que yo me haya enamorado...si quieres castigar a alguien para sentirte mejor...¡¡pues hazlo conmigo!! hasta que te sientas a gusto...- sentencio con una voz ahogada por el dolor que sentia a causa de ese maldito golpe.

Los pasos de Damant eran tan decididos cuando Rossiel le veia acercarse, aquel rostro habia cambiado a uno endemoniadamente "maligno" si, ese rostro el que ambos tenian siempre, cada vez que salian a cazar a otros demonios en el infierno cuando el aburrimiento se hacia presente, derrocando a todos esos desdichados demonios que tuvieron la mala suerte de encontrase justamente en sus caminos, claro no, como olvidar ese rostro que era tan igual al suyo por el odio de algo desconocido...algo que solo ellos dos podian saber a ciencia cierta.
No escatimo palabra cuando sintio el severo agarre de sus prendas, dejandose golpear al antojo del otro que parecia desahogarse al hacerlo, no le detendria...dejaria que hiciera lo que habia sentenciado por su propia voluntad ¡¡todo!! por aquel hombre que le habia robado el corazón.
Mientras sentia como los agonizantes golpes continuaban sobre el, recordo lo que le dijo hace un tiempo atrás a Yullian aquella tarde. Oh si, como no recordar cuando le dijo que una vez que supieran de sus sentimientos le harian pagar por tener tal dicha de sentir todo lo que le embargaba desde esa tarde...las palabras eran filosas navajas que cortaban mas su corazon.
Los golpes se detuvieron cuando sintio que su cuerpo impacto contra el suelo unos metros mas allá.
Retorciendose en el frio suelo llevo una mano a su boca rozando sus labios, notando que de estos escaba mas sangre chorreando sus dedos hasta caer al piso y un charco se acumulaba bajo su rostro...sonrio ante ello y desde esa misma pocision.
-...¿te has cansado ya?...sera esto la mejor cura ante el amor?...- su voz se esforzo por salir con frialdad pero era casi inutil dado que no podia dejar los malditos quejidos que escapaban de sus labios producto del intenzo dolor.

Sumergido en la vista que tenian sus ojos, ese charco de liquido carmin regado por el suelo, expandiendose por las comisuras del agrietado suelo, cerro sus ojos con fuerza cuando Damant comenzo a hablar de un desdichado amor, como era posible que ellos no tuvieran derecho a amar y ser amados, no, no queria pensar en ello cuando sabia de más que era así...algo confundido por notar un tono de voz un poco mas fragil del que tenia antes, levanto su rostro de medio lado mirandole...buscando entontrarse con los ajenos, ahí estaban mirando a la nada mientras continuaba con la triste historia de amor que nunca llego a consumarse.
Con debilidad en sus manos volvio a ponerse en pie, tamabaleandose algo aturdido por la afrenta....sus ojos se abrieron de par a par cuando el demonio le confeso la cura casi inútil para dejar de sentir aquel amor que latia en su pecho masivamente ¡¡no!! como le pedia que le matase, el no seria capaz de hacer algo asi aunque esa fuera una salida rapida.
Camino lentamente hasta él con la mano sosteniendo de su colgante firmemente parando en seco a dos metros de el demonio.
-...no me pidas eso Damant...- su voz se torno una vez mas quebradiza espantado por la solucion. Comprendio al unisono de que demonio hablaba, claro que si, era del mismo Damant, nunca se imagino que ese demonio ahora con forma de hombre ya habia pasado por algo así, sus ojos se volvieron rojizos y de ellos lagrimas carmines escaparon, corriendo por sus mejillas con soltura.
-...yo no puedo hacer eso....de verdad no puedo hacerlo...- moviendo su cabeza en negacion descontrolado.

La historia era de un final tan cruel que la piel de Rossiel se erizó al escucharla, bajo el rostro manchado de sangre pensando en que no habia escapatoria de ese tipico final que los demonios siempre padecian cuando se enamoraban de seres distintos a su especie ¿acaso su historia terminaria igual o peor que aquella?...era demaciado doloroso pensar en eso.
Damant le daba soluciones tan vagas que las ganas de saltar de esa torre a probar si era posible morir se hacian inminentes, pero que caso tenia hacer aquello cuando sabria que al estrellarse contra el piso seguira tan vivo como estaba ahora, un ser inmortal deseando amar?...si, no podia evitar sentir esas ganas locas de que ese deseo, aunque fuese solo ese...se cumpliera.
Levanto un tercio el rostro mirando al demonio una vez mas
-...¿esperar a que muera y reencarne?...- llevo ambas manos a sus cabellos pensando cosas sin sentidos -...se que no me ama y se que tendre que conformarme con solo verle desde lejos....pero esperar a que reencarne? ¡¡no!!...aunque para mi ese tiempo sea poco, sera una tortura esperar a que eso pase....- giro en vista al paisaje que le mostraba la altura de la torre, sobrecojedoramente hermosa ciñendose bajo ese cielo tan sombrio....no queria esa solucion por mas poca que fuera la espera, para Rossiel se sentiria como una maldita eternidad. Sus manos bajaron a su rostro cubriendolo por completo queriendo escapar a la maldita mortandad - no quiero pensar en que envejera y pronto morira...no, yo tengo una solucion para eso Damant...existe una solucion a eso...- no quiso mostrarle su rostro que seguia sollozando en silencio al otro demonio, no queria que le viera de esa manera...tan débil.

Sabia que habia una solucion a lo de una simple humanidad, lo sabia, pero tambien tenia claro que Damant no le dejaria hacerlo asi tan simple...el camino parecia estrecharse cada vez mas y esa noche sabia que aquello no terminaria bien, lo presentia desde el fondo de pútrida alma...retiro lentamente las manos de su rostro encontrandose con los ojos de ese demonio.
No queria verle, aquello le hacia sentir peor por echo de recordarle a él cosas dolorosas y todo por su maldita culpa.
-...Damant...- su voz seguia siendo debil, pero la exasperación se hizo mas fuerte cuando escucho la confesión de aquel demonio, su amigo...ese que le habia acompañado por tantos años, tenia que estar mintiendole quizas para que abandonara la idea de estar con Yullian, como podia llegar tan lejos por el odio a un ser humano.
Renegando una y otra vez corrio la vista de Damant...menuda broma que le gustaba hacerle - deja de decir tonterias...eso no conseguira que deje de amarle...- repuso al momento en que le daba la espalda, iba a irse del lugar...quizas esto terminaria mal asi como siguiese ahí. Mas no pudo evitar decirle antes de emprender su vuelo -...eres mi mejor amigo...eres como mi hermano...deberias entender tu pocision...- eso lo dijo con voz mas segura tomando una fuerte bocanada de aire.

La historia se forja mas triste con cada palabra que escatíma Damant, no quiere interumpirle porque puede ser peligroso para ambos el hecho de seguir peleando por algo que él no entenderia nunca, el amor siega los corazones de los hombres muchas veces y porque no decirlo el de los demonios...con el rostro de lado aun sin voltear, parado en medio de aquella habitacion penumbrosa, observando de soslayo al contrario, con los brazos caidos arás de libertad se pocisionan firmes a sus costados.
-...tengo fé en que ese angel caido volvera a renacer...- gatillando más el tono de voz a uno firme...forzandolo a que no se debilitara en ningun instante.
-...se cual es mi pocisión...no necesitas recordarmelo...solo que no te permitire que le hagas daño al ser que ¡¡yo!! amo...no ostentes contra su vida...ya te dije que el no tiene la culpa de ser amado por un pútrido demonio como yo...- sentencio con voz gelida, aspera mientras se preparaba para dar el primer paso hacia la salida.
Sintio la brusquedad en que fue volteado y tirado contra la pared dandose un fuerte golpe contra esta, causando que esta se crisára al impacto con su espalda donde los restos de estas destajarón sin piedad parte de su piel márfileña...sus sentidos se perturbarón dejando aturdido ceñido a esta mientras cerraba los ojos por el dolor que se plasmaba con abruptividad en su cuerpo.
Todo ocurria tan aprisa que ni cuenta se dio cuando los labios de aquel demonio de unierón a los suyos con brusquedad...arrebatandole parte de su energía que lo dejo mas desorientado que nunca, aún asi por acto reflejo más inútil cerro sus manos en puño colocandolas en el pecho de Damant para que se alejara, pero sus malditas fuerzas no reaccionaban como espero.
-..mmm...- lucho con las pocas fuerzas que le quedaban por elejarlo, pero no fue necesario ya que este se habia elejado por cuenta propia...asemejandose a un vampiro mientras se limpiaba con la manga aquel liquido carmín de sus labios.
Tocio exasperado tratando de respirar el oxigeno que no queria llegar a sus púlmones mirandole inclinado hacia adelante, luchando por no caer al piso rendido...debia salir al encuentro de su amado pero es que las fuerzas le traicionaban y solo percato cuando le decia que los invitados llegarian pronto?...¿para que?....no, a que se referia con eso...acaso Yullian vendria a su encuentro? bajo el rostro medio derrotado buscando soluciones que no habian, era escalvar en un pozo sin fondo.
-....a que te refieres con invitados Damant?...- imploro con desgana por una prueba tangíble.